Mi cumpleaños fue a principio de mes. Las recetas de tartas se han multiplicado este mes de tal manera que me salté sin querer subiros mi tradicional tarta de cumpleaños. Sin duda es la que más gusta en casa.
Ha sido modificada a lo largo de los años. Me he dado cuenta de la evolución del blog con mi tarta de fresas: Las explicaciones, las fotografías, la presentación ha ido mejorando año a año. Aquí os dejo un collage para que también veáis distintas presentaciones.
Podéis pinchar sobre el mes para ver la entrada y las recetas que fui realizando:
Este año volvió a ser "tuneada", su relleno tiene una crema de nata con fresas, y crema pastelera.
Para una tarta grande de bizcocho de 22 centímetros os voy poniendo el paso a paso:
Ingredientes del bizcocho corriente:
6 huevos
150 gr. de azúcar
150 gr. de harina de trigo tamizada
Separamos yemas de las claras en dos boles. Las claras las montamos a punto de nieve bien firmes y reservamos. Si pusieras el bol hacia abajo no caerían.
Batimos en el otro bol bien batidas las yemas junto el azúcar. Queda blanquecino y triplica su tamaño. Incorporamos a esta mezcla la harina y volvemos a batir bien. Es casi imprescindible hacerlo con la batidora de varillas para que coja todo el aire que necesita este bizcocho. Mezclamos con cuidado el contenido de los dos boles y lo repartimos en un molde preparado con mantequilla y espolvoreado con harina.
Horneamos a 180º unos 35 minutos en el caso de mi horno. Si pinchas el bizcocho sale el palito seco.
Almíbar: calentamos 250 ml. de agua, 75 gr. de azúcar, cáscara de naranja sin la parte blanca, canela en rama. Dejamos enfriar y listo. Nos sobrará por lo que lo que sobre en un bote cerrado y la nevera.
El relleno es una crema de fresas que he robado la receta (en realidad se negó a darme las proporciones y me he lanzado...) a mi hermano pequeño:
Crema de fresas:
500 ml. de nata para montar 35,1 % materia grasa
150 gr. de azúcar glass
100 gr. de fresas cortaditas en pequeños trozos y que han estado media hora con una cucharada de azúcar.
Montamos la nata con la batidora, cuando está casi lista le incorporamos el azúcar. Os recomiendo poner poco a poco el azúcar e ir probando, a mi me gusta poco dulce, si ves que te falta azúcar puedes ponerle un poco más.
Crema pastelera:
Ingredientes:
500 ml. de leche
125 gr. de azúcar
2 yemas de huevo
45 gr. de maicena (Fécula)
Aromatizantes: un poco de cáscara de naranja sin la parte blanca, una cucharadita de azúcar avainillado y ramita pequeña de canela.
Reservamos 2 dl. de leche.
Hervimos el resto de la leche con los aromatizantes. Ponemos el azúcar, las yemas, la fécula y los 2 dl. de leche en un bol. Mezclamos bien para evitar la formación de grumos. Incorporamos la leche hervida a la mezcla anterior sin dejar de remover. Poner la crema al fuego medio removiendo constantemente y hevir hasta que espesa. Retirar del fuego y enfriar.
Consejo: si no te gusta la capa que cuando se enfría queda dura en la parte de arriba tápala con papel film mientras enfría.
Para la parte superior de la tarta:
Medio kilo de fresas cortadas por la mitad
4 cucharadas de azúcar
Ponemos mientras hacemos el bizcocho las fresas partidas por la mitad con el azúcar a macerar. Nos dará unas fresas muy dulces, brillantes y un almíbar que vamos a reservar para la gelatina.
Para poner sobre las fresas:
Gelatina, si tienes de color rojo mejor.
Aquí simplemente sigue las instrucciones del paquete de gelatina. Yo siempre uso el almíbar de las fresas para incorporarlo en la gelatina, en la proporción que corresponda en agua. En definitiva si tengo 50 ml. de almíbar y la gelatina pone que he de usar 250 ml. de agua, pongo 200 de agua y 50 de almibar de las fresas.
Solo nos queda montar la trufa cocida:
750 ml. de nata para montar 35,1 % materia grasa
225 gr. de cobertura de chocolate (en mi caso Lindt 70 %)
105 gr. de azúcar
Hervir la nata con el azúcar.
Agregar la cobertura hasta que vuelve a hervir.
Enfriar y dejar en la nevera mínimo 24 horas.
Montamos cómo si fuera nata.
Cómo tenemos todo preparado montamos la tarta. Es laboriosa pero no complicada. De hecho mientras horneas el bizcocho, puedes hacer losdos rellenos y montar la trufa. El almíbar hazlo el día anterior junto con la preparación de la trufa cocida. Cuestión de organización ;-).
Preparamos una bandeja o plato bonito.
Cortamos el bizcocho en tres partes. Ponemos la parte de bajo sobre la bandeja. Con ayuda de un pincel lo pintamos con el almíbar. Ponemos una capa generosa de crema pastelera. Aquí si tienes un aro de los que nos hace de topes en los bizcochos úsalo. Te ayudará a que no sobresalga por los lados. Tapamos con la 2ª mitad de bizcocho y repetimos las mismas acciones pero esta vez con la nata montada y las fresas cortaditas. Cubrimos con la tercera capa de bizcocho y la pintamos con almíbar.
Reparte las mitades de fresa por toda la superficie del bizcocho. Intenta hacer círculos concéntricos y que no quede ni una ranura, pon muchas fresas que seguro que tus invitados/as lo van agradecer.
Sobre las fresas repartiremos la gelatina. Ojo, no debe estar totalmente líquida, debe estar que puedas pintar con pincel pero sin que esté dura o líquida, ainsss que mal me explico ¡¡. Si está muy dura poner unos segundos en el microondas, apenas para que nos deje pintar las fresas sin que lo absorba el bizcocho.
Ahora cogeremos una manga pastelera y una boquilla grande rizada. Repartimos la trufa en filas por todo el borde de nuestra tarta. Ponemos en nevera y lista para comer ¡